A medida que las aplicaciones informáticas se hacen más complejas, aumenta también la dificultad de su gestión y mantenimiento. Estas mayores dificultades pueden provocar que se produzcan errores no deseados, lo que se traduciría en una menor seguridad dentro de la empresa u organización que utiliza tales aplicaciones.
Se hace necesario por ello una respuesta adecuada ante este tipo de problemas, aportando soluciones rápidas y eficaces ya que, en caso contrario, pueden consumirse valiosos recursos e incluso llegar a poner en riesgo a la propia organización. Un adecuado servicio de gestión y mantenimiento de aplicaciones informáticas resulta, por tanto, esencial para abordar de manera eficiente estas dificultades, destacando entre todas las posibilidades los basados en el modelo “Application Management Services” (AMS).
¿En qué consiste el servicio de gestión de aplicaciones AMS?
Con el modelo AMS básicamente se trata de ceder la responsabilidad que el cliente tiene sobre sus aplicaciones informáticas en funcionamiento a un proveedor externo, para que sea este quien se encargue de ellas. De este modo, las tareas de gestión y mantenimiento se externalizan, ocupándose de ellas el proveedor externo, cuya alta cualificación y experiencia en este tipo de servicios redundará en un funcionamiento óptimo de las aplicaciones informáticas, aportando valor añadido a la organización.
Ventajas de usar AMS como servicio de gestión y mantenimiento de aplicaciones
Ya se trate de una empresa grande, mediana o pequeña, el servicio Application Management Services favorece el control, optimización y evolución de su cartera de aplicaciones de una forma constante, mejorando así la eficiencia interna de la empresa, al liberar a su propio equipo de TI de la sobrecarga que suponen tales tareas. Además, en función de la evolución de las necesidades de negocio, el proveedor externo se irá asimismo adaptando, de tal forma que las aplicaciones utilizadas funcionen siempre a la perfección.
Según sean las necesidades y características de cada empresa, pueden contratarse diferentes modelos de este servicio de mantenimiento de aplicaciones informáticas, cada uno de los cuales podrá emplear sus propias metodologías y herramientas, o bien adaptar estas en función del cliente. Los servicios pueden abarcar en este sentido desde el soporte de SAP hasta una completa subcontratación de aplicaciones, incluyendo:
- nuevas implementaciones
- evaluaciones
- servicios de asesoramiento
Hay que tener presente a este respecto que los proveedores que se ocupan de este tipo de mantenimiento suelen disponer de especialistas en diversas tecnologías, lo que les permite ofrecer un servicio de alta calidad y excelentes resultados. Aparte de la liberación de recursos cualificados, los modelos de mantenimiento AMS pueden presentar otras ventajas para la empresa, tales como liberación de espacio físico o reducción de costes operativos. El proveedor se asegura, demás, de que sus aplicaciones se mantengan en todo momento actualizadas.
En definitiva, el servicio Application Management Services favorece una gestión integral de las aplicaciones y sistemas informáticos de sus clientes, llevando a cabo su mantenimiento y mejora continuos.
¿Quieres saber más sobre la importancia de realizar un mantenimiento de aplicaciones adecuado y cómo hacerlo? Consúltanos y te ayudaremos a valorar la mejor opción.